Mezclando ambición y humildad el Ibiza quiere seguir sumando, la fórmula que convierte a una plantilla en un bloque «fiable». Así lo ha explicado hoy Pablo Alfaro en su rueda de prensa semanal. «El equipo está con muchas ganas de volver a competir. Un partido tan completo como el del Racing de Ferrol te refuerza para seguir en la línea de lo que queremos ser».

La siguiente parada del viaje es el Sporting B. El filial sportinguista es un adversario en línea ascendente, pero para el míster del Ibiza no hay más «objetivo que ganar el partido», que se jugará sobre hierba natural en Mareo. «Hay muchos filiales en el grupo, son mas jóvenes e inexpertos, pero por otro lado suelen tener unas capacidades superiores en otros aspectos. Creo que nos adaptaremos bien a lo que nos proponga el rival y ellos tendrán que adaptarse a lo que propongamos nosotros. Ya sabéis que esto es una lucha de dos y al final gana quien se lleva el partido donde más le interesa», ha explicado Alfaro a los medios de comunicación.

Después de un mes y medio de competición, Alfaro y su cuerpo técnico han ido afinando las prestaciones de una plantilla que reluce sana y sin sanciones. La ausencia de bajas es sinónimo de riqueza para el entrenador. Y, también, de más trabajo para decidir los descartes. «Opciones para poder cambiar futbolistas, para ver cómo entrenan y progresan, para saber quién está llamando a la puerta para entrar en el once y ser importante… Esta semana los 21 componentes de la plantilla están disponibles y va a ser difícil porque se va a quedar sin viajar gente que no se merece quedarse en casa. Pero esto es la competición y decidir es mi labor, siempre en beneficio del equipo», ha dicho Alfaro.

El aragonés tiene claro que la temporada larga que está en marcha ofrecerá posibilidades para todos los futbolistas del Ibiza. Dos nombres propios que aún no han debutado con la celeste han salido en la rueda de prensa. Sobre Álex Quintanilla ha dicho Alfaro: «Se ha integrado muy bien. Tiene la jerarquía que da la edad y la trayectoria. Tengo cuatro centrales de notable alto para sobresaliente. Por estadística, suele ser la posición donde más rotaciones hay y más minutos se reparten. Hay sitio para todos, ya lo veréis».

Y del ghanés Sibo ha explicado el míster: «Kwasi es un chico muy extrovertido que da alegría al vestuario. Queremos que sea un jugador importante. Es un centrocampista de muchísimo recorrido, características que tampoco teníamos en la plantilla». Dos soldados más para una guerra que acaba de comenzar y será larga.

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