Jesús volverá a poner su contrastada calidad bajo palos al servicio del Ibiza la temporada que viene con la mente puesta en el ascenso a Segunda División B. Un portero de su categoría no puede estar en otro equipo que no sea el celeste y así lo ha querido el de Esplugues de Llobregat, que sabe muy bien que como en Can Misses no va a estar en ningún lado. El joven, que aterrizó en la isla el verano pasado procedente del Cornellà, tiene muy claro que quiere seguir creciendo como guardameta en el club unionista y, pese a que volverá a encontrar en su compañero Álex una dura competencia, no baja los brazos y volverá a dejarse la piel en los entrenamientos y en los partidos que juegue para ponérselo difícil al entrenador Ñoño Méndez. Porque Jesús confía en sus posibilidades y ha renovado una campaña más porque espera y desea dar el golpe definitivo y triunfar en un Ibiza que apunta muy alto en la 2018-2019. La afición ya se muere de ganas por ver en acción al arquero insaciable, al arquero voraz.

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