Francisco Natera. Para el jugador del San Rafael David Yeste la temporada se le acabó ayer lunes. Y es que a los pocos minutos de comenzar el entrenamiento, el defensa se fracturó por cuatro partes su pómulo derecho en una acción fortuita con su compañero Juancar. Ambos saltaron para rematar un balón de cabeza con tan mala fortuna que el lateral sufrió un cabezazo del portero. Yeste acabó KO, tendido sobre el césped y sangrando abundantemente por la nariz, por lo que fue trasladado a Can Misses.
Esta mañana, el futbolista ha sido operado con éxito de la fractura, aunque tendrá que guardar, al menos, seis semanas de reposo absoluto, hasta que el hueso, que ha sido reforzado por dos placas, suelde. Pese a todo, Yeste se toma con sentido del humor la lesión que le impedirá saltar este domingo al campo en el partido más importante de la temporada, donde el San Rafael se juega la permanencia en la categoría en un partido a cara de perro frente al Rotlet Molinar.
“La verdad es que he tenido muy mala suerte”, apunta el defensor, que añade con guasa: “Salté con Juancar y yo rematé el balón y él remató mi cara con tanta fuerza que me dejó noqueado, pero que le vamos a hacer; es lo que hay, así que ahora tendré que recuperarme bien, que es lo más importante”. No obstante, el jugador se encuentra algo jodido por no poder ayudar a sus compañeros este domingo. “Me sabe mal perderme este partido; y más cuando más lo necesita el grupo. Estamos muy cortos de efectivos y nos jugamos la vida ante el Rotlet”, indica.
Yeste, de todos modos, está convencido de que el San Rafael ganará la gran final y salvará la categoría. “No me cabe duda. Venceremos y podremos festejar la permanencia después de una campaña complicada y dura. Yo no estaré en el campo, pero les voy a enviar toda mi energía y buen rollo a mis compañeros”, comenta el jugador, que, con ironía, prosigue: “A ver si todavía me pongo a jugar con una máscara, como hacía Puyol en el Barcelona”.
Desde Fútbol Pitiuso deseamos una pronta recuperación a Yeste.
