El Class Bàsquet Sant Antoni se encuentra en su mejor momento de la temporada y este sábado se enfrenta a un desafío de altura. Con once victorias consecutivas en su haber, el equipo pitiuso buscará prolongar su racha triunfal ante un CB Prat que también llega en buena dinámica y con la moral en alza tras encadenar dos triunfos seguidos. La pista del Pavelló Joan Busquets, una de las más exigentes de la categoría, dictará sentencia en un duelo de alto voltaje entre dos aspirantes a los puestos de privilegio en la Segunda FEB.
El equipo dirigido por David Barrio tiene claro que la visita a tierras catalanas no será un trámite sencillo. En la primera vuelta, los ibicencos cayeron ante el Prat en un partido donde mostraron una versión alejada de la solidez que hoy los define. Desde entonces, la evolución del conjunto balear ha sido evidente, convirtiéndose en el bloque más en forma del campeonato. Ahora, con la segunda plaza del grupo Este en juego, el Sant Antoni buscará resarcirse y reafirmar su candidatura al ascenso.
El Prat, por su parte, cuenta con una plantilla experimentada y equilibrada, con nombres como Sergi Costa y Marc Peñarroya, jugadores con pasado en LEB Oro, además de Pau Carreño, ex del Sant Antoni, que está firmando una gran campaña en el equipo catalán. Su juego, caracterizado por un ritmo dinámico y una defensa sólida, representa un desafío para cualquier rival. Bajo la batuta de Josep Maria Raventós, técnico con experiencia en la ACB, los locales intentarán imponer su estilo y cortar la inercia triunfal de los pitiusos.
En lo estadístico, el Class Sant Antoni llega a la cita con un balance de 14 victorias y 5 derrotas, situándose en una cómoda segunda posición. El Prat, con 11 triunfos y 8 partidos perdidos, ocupa la sexta plaza, pero con opciones de seguir escalando. Ambos equipos vienen de partidos exigentes: los sanantonienses doblegaron con solvencia al Sol Gironès Bisbal Bàsquet (70-61), mientras que el Prat tuvo que sudar para imponerse al filial del Gran Canaria (83-87).
La clave del partido pasará por el control del rebote y la capacidad de imponer el ritmo de juego. David Barrio confía en la profundidad de su plantilla y en el estado de forma anímico y físico de sus jugadores para hacer el partido largo a su rival y desgastarlo con rotaciones constantes. Si los pitiusos logran plasmar la versión mostrada en su última salida ante el Llíria, tendrán muchas opciones de seguir sumando victorias y reforzar su posición de privilegio de cara a las eliminatorias de ascenso.
Este sábado, a las 18:00 horas, el Pavelló Joan Busquets será testigo de un choque electrizante. Solo uno podrá mantener su racha victoriosa. La batalla está servida.