Paco Natera La etapa de Goku en el Formentera ha finalizado antes de lo que el propio jugador hubiera deseado. El centrocampista granadino abandona la isla triste, pero ilusionado por encontrar un equipo donde se sienta más valorado. Y es que bajo las órdenes de Tito García Sanjuán no ha encontrado la consideración que cree merecer. Este mediodía, el ya exrojinegro ha puesto rumbo a su tierra con cierta pena porque deja en la Pitiusa menor grandes compañeros y amigos, así como una afición que siempre le ha arropado y que despide al chaval con melancolía porque en pocos meses ha dejado huella.

Goku no ha tenido el protagonismo deseado. Llegó a jugar en muchos partidos como titular, pero últimamente no contaba demasiado para el técnico maño. Quedarse en el banquillo sin disputar ni un minuto en algunos de los desplazamientos a Mallorca fue minando la moral de un jugador que explotó cuando Tito García Sanjuán decidió no sacarle en el pasado partido copero frente al Sevilla en el Sánchez Pizjuán. El de Granada, que si jugó algunos minutos en el encuentro de ida, soñaba con saltar al verde de un estadio de Primera para medirse a un rival de los grandes, pero no tuvo esa oportunidad y tuvo que ver el partido desde el banquillo.

“Un jugador de Tercera tiene muy complicado jugar un partido ante un gran equipo y en un campo de primer nivel. Yo soñaba con jugar en el Sánchez Pizjuán para que mis padres y mi gente pudieran verme, pero el míster no contó conmigo y es algo que me ha dolido mucho y el principal motivo por el que he decidido dejar el Formentera”, señala Goku. “Se supone que la eliminatoria ante el Sevilla era un premio para todo el equipo, pero para mí no fue así. Me hubiera encantado participar en el encuentro algunos minutos y ver felices a los míos, que vinieron a verme a Sevilla, pero se tuvieron que ir con mal sabor de boca”, añade el mediocentro.

Desde ese día, Goku dejó de ver de la misma manera a Tito García Sanjuán, perdiendo toda su ilusión en el proyecto de ascenso del club que preside Xicu Ferrer. “Después de lo que me hizo el míster no me veía con ganas de continuar. Que no me sacara en el Sánchez Pizjuán me sentó muy mal. Era algo que no esperaba y no lo he superado porque para mí era muy importante ese partido. El entrenador me privó de cumplir uno de mis sueños y ya no tenía ningún sentido continuar en el Formentera porque mi ilusión se vino abajo. Durante estas vacaciones estuve meditando mi continuidad, pero no le perdono a Tito García Sanjuán lo que me ha hecho, dejarme sin disfrutar la fiesta de Sevilla, así que lo mejor es irme”, afirma el futbolista.

Pese a todo, Goku se va del Formentera satisfecho del rendimiento aportado. “Siempre lo he dado todo, desde el primer día”, asegura el centrocampista, que se siente mal por dejar “a grandes compañeros”. “Hemos sido una piña, un gran grupo humano y es con lo que me quedo. Me he sentido muy querido y me voy con muchos amigos para Granada. La afición también se ha portado muy bien conmigo y es de agradecer. He recibido muchos mensajes de apoyo en el móvil y es algo que me ha emocionado mucho”, sentencia un jugador que tiene muy buenas palabras también para el presidente Xicu Ferrer. “Siempre ha estado ahí y le doy las gracias por todo el respaldo que me ha dado”, confiesa Goku, que se va deseándole lo mejor al Formentera y deseando volver a vestirse de corto para disfrutar de su gran pasión.