En manos de Rafa Ríos

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Rafa Ríos se define como un entrenador exigente y ambicioso.

Paco Natera Llega aire fresco y renovado a las filas del Portmany juvenil. Después de una etapa de tres temporadas bajo el mando de Montalbán y Carlos Marí, el club sanantoniense le ha encomendado el plantel de Liga Nacional a Rafa Ríos, un entrenador de la casa, poseedor del Nivel 2 y que en los últimos tiempos ha dirigido a la formación cadete. El míster ibicenco es un todo un estudioso del fútbol, conoce a la perfección a los jugadores de su nuevo vestuario y se define como un técnico “exigente y ambicioso”. Afronta el reto con la máximas ganas y no se conforma únicamente con salvar la categoría. Apuesta por una temporada ilusionante y confía en el trabajo diario del grupo para llevar al Portmany al “mejor puesto que se pueda en la tabla”. Eso sí, Rafa Ríos es cauto y prefiere ir partido a partido a lo largo de una campaña que se presenta la mar de atractiva para un equipo que espera dar muchas alegrías a su afición, acostumbrada últimamente a sufrir más de la cuenta.

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El nuevo estratega portmanyista ya se encuentra trabajando en la planificación de la plantilla para la próxima temporada. Explica que ya tiene una muy buena base de futbolistas para encarar con garantías la exigente competición autonómica y que, además, pretende reforzar el bloque “con al menos cinco futbolistas”. Eso sí, no podrá contar con Adrián Montalbán ni con Cloudes, jugadores que han firmado por la Peña Deportiva, que jugará en División de Honor. Aún así, Rafa Ríos está convencido de poder armar un equipo sólido y competitivo para no pasar excesivos apuros en un torneo balear al que espera ir cogiéndole el pulso durante las primeras jornadas e ir asentándose en la clasificación con el objetivo de que el plantel vaya acumulando dosis de confianza y autoestima con las que afrontar una competición que no permite demasiados tropiezos. “El grupo está con ganas y creo que irá todo bien la temporada que viene”, comenta el preparador, que forma parte del staff técnico en los campus de FC Barcelona.

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“Mi idea es formar un buen grupo de trabajo, con gente entregada y comprometida. Todos los chicos me conocen y saben que soy exigente”, sostiene Rafa Ríos, que tiene muy claro qué dinámica de trabajo quiere. “Me gusta mucho los entrenamientos con balón y pienso que los jugadores lo van a agradecer”, asegura el entrenador, que quiere potenciar la línea defensiva como piedra angular de su proyecto deportivo. “El año pasamos encajamos más de 80 goles y pienso que esto es un lastre. Tenemos que hacernos fuertes atrás si queremos mejorar y progresar”, aclara el técnico portmanyista, quien, por su puesto, también va a impulsar el juego ofensivo. “Pese a la baja de Adri Montalbán, tenemos a gente que lo puede hacer muy bien arriba y estamos pendientes de fichar a algún jugador que llegue para sumar en tareas de ataque”, añade un Rafa Ríos que tiene mucha esperanza con el porvenir del equipo. “Pienso que tenemos gente para hacer un buen papel y no sólo limitarnos a salvar la categoría. Las aspiraciones son máximas y quiero que miremos hacia arriba, que vayamos partido a partido con ilusión y con el objetivo de ir sumando victorias”, concluye.

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